top of page

Parador Nacional San Francisco I

 

  • El Parador de San Francisco es un alojamiento turístico perteneciente a la red de Paradores Nacionales de Turismo, abrió sus puertas al público en 1954, situado en la ciudad de Granada, España. Está ubicado en un convento del siglo XV, dentro del recinto de la Alhambra, construido por los Reyes Católicos en 1494 sobre un palacio nazarita, el palacio de los infantes de Muhammad III (1303-1309), del que aún se conservan importantes restos como la Sala Nazarí.

     

    El pilar de la entrada es de piedra de Sierra Elvira  como la inmensa mayoría de los granadinos.

     

    Es de base rectangular, con pila ligeramente abombada y lisa y remate en cuarto de bocel. La  decoración se restringe al frontis dividido en tres paneles centrales y dos aletas esquemáticas en relieve a ambos lados. El panel central lo ocupa un  mascarón en forma humana saliendo de su boca el caño de agua. Se trata de un rostro masculino con doble bigote, barba puntiaguda, nariz ancha, frente amplia y cabello rizado.

     

    Los caños laterales salen del centro de dos mascarones en forma de león con  elenas concéntricas y orejas despegadas. La cornisa del pilar es recta y soporta dos piramidones en los  extremos. En el centro aparece un escudo adosado a la pared perteneciente a la familia Silva. D. Juan de Silva, hijo de D. Alonso de Silva y Acuña, segundo marqués de la villa de Cifuentes y alférez mayor de Castilla, “participó en el asalto de Salobreña y en el desastre para el ejército cristiano, en al Axarquía de Málaga, donde fue hecho prisionero con otros muchos caballeros y donde murieron, entre otros, dos hermanos del Marqués de Cádiz, d. Lope y D. Bertrán Ponce de León. Después de libertado volvió a la campaña, donde continuó hasta la toma de Granada.

     

    No sabemos si este escudo pertenecía al pilar al que está unido o si vino de otra parte y se adjuntó a él en este nuevo emplazamiento. Tampoco sabemos si el escudo estaba en Granada o si llegó de fuera.

     

    .Actualmente remata el paseo central de acceso al antiguo convento, en sincronia perfecta con las piletas de origen árabe que surgen entre el pavimento de empedrado granadino.

     

    Fué ubicado en este lugar durante las obras de restauración del convento y adecuacion del establecimiento hotelero, tras ser retirado de una casa de la ciudad que iba a ser demolida.

 

bottom of page